Los mejores ejercicios para pies sanos

El verano es un buen momento para dar un poco más de amor a tus pies trabajadores. Si está al aire libre realizando actividades vigorosas, es posible que le empiecen a doler los pies. Como el resto de tu cuerpo, las articulaciones de tus pies necesitan el apoyo de músculos fuertes y flexibles, dice la fisioterapeuta y terapeuta de yoga de Santa Mónica, California, Sherry Brourman.

Sin embargo, a menudo se pasan por alto. "Los pies tienen un gran trabajo; es muy importante que los cuidemos", dice. Brourman, el autor de Walk Yourself Well, sugiere que le prestes a tus pies tanta atención como a tus caderas y espalda.

El yoga puede ayudarlo a desarrollar una alineación equilibrada en sus pies, lo que puede resultar en una mejor alineación en todo su cuerpo, dice Brourman. También puede prevenir y curar problemas en los pies como fascitis plantar, juanetes y calambres en las piernas.

Al hacer yoga, estire y active conscientemente sus pies. Imagínelos como "pequeños coches de cuatro ruedas", sugiere Brourman. Presione firmemente en cada una de las ruedas: la base del dedo gordo del pie, la base del quinto dedo y la mitad de los talones internos y externos.

Ejercicios de pies

Además del yoga, pruebe los siguientes ejercicios para estirar y curar sus pies:

Tejido: ayuda a aliviar los síntomas de los juanetes.

Teje los dedos de una mano entre cada uno de los dedos del pie opuesto. Con un agarre firme, estire y masajee los dedos y la bola del pie, fomentando la movilidad y abriendo el espacio entre los dedos.

Scrunches de toalla: Fortalece los arcos, alivia la fascitis plantar.

Siéntese con los pies apoyados en el suelo, las rodillas dobladas a 90 grados y una toalla extendida debajo de los pies. Aprieta los dedos de los pies para agarrar pedazos de la toalla y jálala hacia ti, centímetro a centímetro, de modo que se amontone en tus arcos.

Palmera: Fortalece tobillos y pantorrillas.

Párese en postura de la montaña, tocando ligeramente una pared con las manos para mantener el equilibrio. Inhalando, levante los talones lo más alto posible; exhalando, tráelos de vuelta a la tierra. Repite de 5 a 10 veces.

Apretar y flexionar: bueno para restaurar la flexibilidad, aliviar juanetes y dedos en martillo.

Sentado en una silla, apoya los talones en el suelo. Inhale y flexione los dedos de los pies para que haya espacio entre todos ellos. Exhalando, aprieta los dedos de los pies para formar un puño. Repite de 5 a 10 veces.

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